DERMAPLANING, LA úLTIMA TENDENCIA VIRAL DE TIKTOK PARA ELIMINAR EL VELLO: ¿DEBERíAS HACERLO EN CASA?
Hablamos con dermatólogos y expertas en belleza sobre esta nueva moda de afeitado facial, que sólo en Instagram supera 2,9 millones de publicaciones.
Pocas prácticas virales sorprenden a estas alturas. Nos estamos acostumbrando a contemplar en redes sociales todo tipo de retos que alcanzan las reproducciones por miles. Especialmente, en el mundo de la belleza. Pero, de vez en cuando, alguna tendencia llama sobremanera la atención o puede generar ciertas dudas sobre si es o no útil y recomendable.
Según influencers y gurús de TikTok, el dermaplaning es lo último para acabar con imperfecciones, costras, grasa y la llamada piel de melocotón, eliminando el vello facial. Estos pelillos finos carecen de pigmento, por tanto, es complicado acabar con ellos con técnicas que detectan la melanina, como la depilación láser. ¿Tiene algún beneficio afeitarse la cara? ¿Es una locura más si no eres un hombre que quiera lucir una barba cuidada?
¿QUÉ ES EL DERMAPLANING?
"El dermaplaning es una técnica no invasiva que utiliza una cuchilla estéril o bisturí para raspar la superficie de la piel, eliminando así la capa más externa de células muertas (estrato córneo) y el vello fino no deseado. El resultado prometido es una piel más suave, uniforme y luminosa, lo que ha llevado a su adopción tanto en clínicas dermatológicas como en tratamientos caseros", explica el Dr. Carlos Morales Raya, dermatólogo director de la clínica que lleva su nombre en Madrid.
Con este utensilio se logra un afeitado más apurado que con una maquinilla, cuenta, pues al arrastrar con cuidado la hoja por el rostro se pueden retirar suavemente las células muertas de la piel y el vello comúnmente conocido como pelusa o piel de melocotón. A pesar de su simplicidad aparente, el dermaplaning debe realizarse con precaución y conocimiento adecuado de la anatomía y fisiología de la piel, alerta el dermatólogo. "Cualquier error puede causar irritación, cortes, hiperpigmentación o incluso infecciones cutáneas". En definitiva, no es tan fácil y sencillo como nos hacen creer esos vídeos en apenas segundos, incitando a copiar esa conducta.
ARRASA EN REDES SOCIALES
El método de depilación facial ha arrasado en el mundo online, con más de 2,9 millones de publicaciones etiquetadas como #dermaplaning sólo en Instagram y casi 150.000 en TikTok. Sus prescriptoras alaban su capacidad de revelar un cutis más radiante y juvenil, además de proporcionar un lienzo impoluto para el maquillaje. Elogian también la técnica alegando que ayuda a la piel a respirar y absorber mejor los sueros, humectantes y otros tratamientos de belleza aplicados posteriormente. ¿Qué hay de cierto?
"Desde un punto de vista científico, la eliminación del estrato córneo mediante técnicas de exfoliación física, como el dermaplaning, puede favorecer una mayor penetración de productos tópicos, como sérums y cremas hidratantes. Además, al eliminar las células muertas de la piel, se promueve la renovación celular. Varios estudios han demostrado que la exfoliación mecánica controlada puede ser beneficiosa para pacientes con textura irregular, ya que ayuda a suavizar las líneas finas y las cicatrices superficiales", asevera Morales Raya.
"Esta técnica puede ser beneficiosa para muchas personas, especialmente, aquellas que buscan una piel más suave", especifica la Dra. Maribel García Briz, dermatóloga de IMR Madrid. Pero no es adecuada para todos los tipos de piel y es importante consultar con un dermatólogo como ella antes de someterse al procedimiento para asegurarse de que sea seguro y efectivo. "Tampoco estaría recomendado en personas con patologías como la rosácea o el acné, ya que puede empeorar su estado", añade esta profesional.
CONTRAINDICACIONES
Los efectos son temporales y, como en cualquier tratamiento, dependen de la correcta técnica y del cuidado posterior, advierte Morales Raya. Es decir, tras el rasurado, en unos días volveremos al punto de partida. "Si bien el dermaplaning puede parecer un procedimiento sencillo y seguro, hay ciertos riesgos que no deben subestimarse. En primer lugar, es crucial realizarlo en un entorno controlado, preferentemente por profesionales capacitados. La presión excesiva o el uso incorrecto de la cuchilla puede llevar a microcortes, lo que aumenta el riesgo de infecciones bacterianas".
Además, la exfoliación excesiva puede comprometer la barrera cutánea, prosigue el dermatólogo, "causando sequedad, irritación y brotes de acné".
Sebastian Podlipnik, especialista en dermatología en el Hospital Clínic de Barcelona, cree que no todo es blanco y negro y opina que tiene sus pros y sus contras. "A pesar del entusiasmo generado por el dermaplaning en las redes sociales, la literatura científica sobre su efectividad y seguridad es limitada".
A FAVOR
Lo positivo de esta técnica es que elimina el vello facial fino y exfolia la piel al remover las células muertas de la superficie, apuesta Podlipnik. "Hay varios aspectos positivos como consecuencia de esta exfoliación. Por una parte, la piel queda más suave y luminosa, por otra mejora la absorción de productos".
El dermaplanning también ayuda a minimizar la apariencia de cicatrices de acné y arrugas finas al revelar una piel nueva y más firme, continúa. "En ocasiones, además, puede mejorar el tono de piel y reducir las manchas solares". Como dermatólogo, puede decir que es una técnica no invasiva y relativamente segura cuando se sabe realizar o cuando lo hace un profesional. "No se requieren productos químicos agresivos ni calor".
"Es una técnica muy precisa, y lo que la ha convertido en viral no es la eliminación del vello, sino de la capa superficial de células muertas, el estrato córneo", afirma Raquel González, cosmetóloga y directora técnica de Perricone MD.
EN CONTRA
¿Por qué no es la mejor opción? Podlipnik critica su temporalidad. "Los resultados que se obtienen no son permanentes y, por lo tanto, el vello volverá a crecer en unas semanas. Esto contrasta con métodos como la electrólisis o el láser, que pueden ofrecer resultados a más largo plazo". Aunque no tenga muchos riesgos de complicaciones sí puede provocar infecciones, cicatrices y decoloración de la piel (hiperpigmentación o hipopigmentación).
"Estos efectos adversos son poco comunes, pero pueden ocurrir. Además, puede provocar irritación, enrojecimiento o sensibilidad en la piel, especialmente si no se realiza correctamente o si se hace con mucha frecuencia". Y no lo recomendaría en personas con ciertas condiciones cutáneas, como acné activo, eczema, psoriasis o quemaduras solares.
"Quienes tienen problemas de cicatrización, como tendencia a formar queloides, deben consultar a un médico, preferiblemente un dermatólogo antes de someterse al procedimiento", advierte.
DUDAS FRECUENTES
Si el procedimiento elimina el vello fino, ¿puede salir después más grueso? "No cambia su estructura y cualquier crecimiento posterior será de la misma calidad, desmitificando el miedo infundado de que el vello se vuelva más grueso", indica Morales Raya.
¿Tiene respaldo basado en la evidencia? "La mayoría de los estudios sobre exfoliación física no se centran específicamente en el dermaplaning, sino en otras técnicas como los peelings químicos o microdermoabrasiones, los cuales también buscan mejorar la textura y luminosidad de la piel".
¿Tengo que tener cuidado después si me someto al procedimiento? Muy importante, después del tratamiento, según el dermatólogo Podlipnik, es importante evitar la exposición al sol y seguir las indicaciones de profesionales para evitar complicaciones y maximizar los resultados. "Recomiendo siempre evitar afeitarse la zona tratada y limitar las actividades físicas intensas durante al menos cuatro semanas". El agua en la ducha tampoco debe estar excesivamente caliente ni se aconseja ir a saunas en unos días.
HACERLO EN CASA: ¿SÍ O NO?
En conclusión el dermaplanning puede ofrecer beneficios cosméticos superficiales, según los expertos consultados. No obstante, se debe enfatizar la importancia de que el procedimiento sea realizado por un profesional con experiencia para evitar complicaciones. Aunque el dermaplaning puede ser una herramienta eficaz para la exfoliación de la piel, no es una panacea, y sus efectos son temporales y limitados.
"Es necesario que los pacientes sean informados sobre los posibles riesgos y limitaciones del procedimiento, especialmente cuando deciden someterse a él fuera del entorno clínico", admite Morales Raya. En última instancia, como dermatólogo, aboga por un enfoque equilibrado y fundamentado en la evidencia científica a la hora de adoptar nuevas tendencias de cuidado de la piel y no seguir a pies juntillas lo que vemos en un vídeo viral, por mucho que nos fiemos del prescriptor. "Cualquier tratamiento debe adaptarse a las necesidades individuales de cada paciente, con el objetivo de preservar y mejorar la salud cutánea a largo plazo".
Para el especialista Sebastian Podlipnik es una opción efectiva para la exfoliación y eliminación temporal del vello pero -y esto es fundamental- "no debe hacerlo cualquier persona, ya que hay tener en cuenta las limitaciones del procedimiento y evaluar si es la opción más adecuada según las condiciones individuales de la piel. Hay profesionales que realizan esta técnica y siempre será mucho más seguro".
En esta idea insiste también Lara González, cosmetóloga en Byoode. A menos que seas un profesional, no es recomendable realizarlo en nuestro cuarto de baño. "Nadie debería pensar que, para tener una piel bonita, es necesario practicar dermaplaning", opina Estefanía Nieto, directora de dermocosmética de Medik8.
Además, el vello facial tiene una función protectora natural, apunta Marta Agustí, directora de dermocosmética de Omorovicza, totalmente contraria a coger, por ejemplo, una cuchilla. "El rasurado continuo puede hacer que el vello parezca más grueso al crecer, dando la sensación de que hay más pelo. Si no lo realiza un profesional con el instrumental adecuado pueden aparecer microheridas e irritación, entre otros problemas".
Por último, Natalia Abellán, directora de dermocosmética de Ambari, alerta sobre el hecho de que deje la piel más desprotegida. Primero, porque no hay vello y, segundo, porque se trata de una exfoliación mucho más profunda. "Eso sí, es más recomendable optar por la exfoliación química, mecánica o enzimática en lugar de rasurar. No debemos olvidar que el vello está ahí para protegernos".
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